Aquí te dejo algunas ideas para aprovecharla:
Salsas y aderezos: Puedes mezclar el pimiento caramelizado en polvo con aceites, vinagres, mostazas o yogur para crear salsas o aderezos con un sabor profundo y ligeramente dulce. Es ideal para ensaladas, tacos o como acompañamiento de carnes.
Condimento para carnes: Espolvorea el pimiento caramelizado en polvo sobre carnes antes de cocinarlas (pollo, cerdo, res, etc.), o incluso durante la parrillada. Este polvo le da un toque de dulzura y un sabor ahumado, perfecto para marinados o como un toque final al momento de servir.
Galletas o panes: Si te gustan los sabores contrastantes, prueba incorporarlo en la masa de galletas o panecillos salados.
Combinado con un poco de queso o hierbas, puede crear un sabor inusual y delicioso.
Patatas fritas o al horno: Espolvorea el pimiento caramelizado en polvo sobre patatas fritas o asadas, ya sean de forma clásica o en forma de puré. Le dará una capa extra de sabor que combina la dulzura del azúcar con el toque ahumado del pimiento.
En sopas y cremas: Añadir un poco de este polvo a sopas y cremas (como la de calabaza, zanahoria o tomate) puede realzar los sabores, dándoles un toque agridulce y un poco más de profundidad.
Pasta o arroz: Agrega pimiento caramelizado en polvo a tus platos de pasta o arroz para darles un toque especial. Puedes mezclarlo con un poco de aceite de oliva y hierbas para sazonar cualquier plato de pasta simple o incluso arroces como el risotto.
Vegetales asados: Rocíalos con un poco de este polvo antes de asarlos o saltearlos para realzar su dulzura natural y darles una capa extra de sabor. Los vegetales como zanahorias, cebollas o berenjenas se benefician mucho de este tipo de condimentos.
Ceviches y mariscos: Puedes usarlo para dar un giro a los ceviches o platillos con mariscos, combinándolo con jugo de limón, cilantro y otros condimentos.
Queso de crema: mezcla con queso de untar hasta conseguir un untable a pimiento caramelizado con un sabor único.